Ser propietario de una vivienda puede brindarte estabilidad, independencia y mejorar tu estilo de vida y el de tu familia. Además, contar con una vivienda propia puede ser una opción para obtener liquidez en momentos de necesidad. Si necesitas dinero, puedes venderla, arrendarla o incluso hipotecarla y seguir viviendo en ella.
Créditos hipotecarios de liquidez
Los créditos hipotecarios son aquellos que tienen una propiedad como garantía. Uno de los tipos de créditos hipotecarios es el de liquidez, que te permite utilizar el dinero otorgado para cualquier fin que necesites, como pagar deudas, comprar algo que necesites, solventar alguna situación desafortunada, pagar la universidad de tus hijos, etc. Para acceder a un crédito de liquidez necesitas ser propietario de una vivienda, que sirve como garantía de pago para el crédito.
Consideraciones para un crédito de liquidez
Antes de solicitar un crédito de liquidez, es importante que tomes en cuenta que el monto del crédito nunca será del 100% del valor de la vivienda. Por lo general, los bancos ofrecen entre el 50 y 70% de su valor. Estos créditos también tienen plazos más largos que los créditos normales, que pueden llegar a ser de hasta 20 años, pero recuerda que a menor plazo, menor será el interés. La propiedad no debe tener ningún adeudo ni gravamen, y el solicitante del crédito debe tener entre 21 y 78 años, comprobar ingresos y tener un trabajo estable.
Cómo elegir el mejor crédito de liquidez
Antes de elegir un crédito de liquidez, es recomendable comparar con varias instituciones financieras y productos para encontrar el mejor crédito hipotecario de liquidez para ti. Esto requiere tiempo, esfuerzo y conocimientos financieros para considerar otros factores además de la tasa de interés. Una buena opción es buscar la ayuda de un experto hipotecario, como los asesores especializados de WeDo Brokers, quienes conocen los distintos factores que se deben considerar para hacer una correcta elección crediticia.
